Las mordeduras de serpientes venenosas representan una emergencia médica grave, pero a diferencia de muchas enfermedades letales, cuentan con una solución altamente efectiva: el suero antiofídico.
Este tratamiento es el único capaz de neutralizar los efectos del veneno y prevenir complicaciones graves como insuficiencia renal, hemorragias masivas, parálisis e incluso la muerte.
¿Por qué es tan importante el suero antiofídico?
El suero es un antídoto específico que actúa directamente sobre los componentes tóxicos del veneno, deteniendo su acción antes de que cause daños irreversibles. No existe ningún sustituto ni tratamiento alternativo que iguale su eficacia, lo que lo convierte en un recurso esencial para salvar vidas.
Variedad de antídotos en el mundo
Existen diferentes tipos de sueros antiofídicos adaptados a las serpientes venenosas de cada región:
Suero Antiofídico Polivalente: Capaz de neutralizar el veneno de varias especies.
Ejemplo: El suero producido en Caracas por Biotecfar y el producido en Colombia por el Instituto Nacional de Salud (INS) (reconocido por su alto grado de pureza y eficacia).
Suero Antiofídico de Alta Pureza: Fabricado con métodos avanzados para reducir al mínimo las proteínas no específicas que causan reacciones adversas.
Ejemplo: El Instituto Clodomiro Picado en Costa Rica utiliza una técnica innovadora con ácido caprílico para obtener sueros más seguros.
Faboterápicos: Estos sueros, producidos en laboratorios como BIOCLON en México, utilizan fragmentos específicos de anticuerpos que no solo son más eficaces, sino que también minimizan el riesgo de reacciones alérgicas severas.
Suero Monovalente: Específico para tratar mordeduras de una sola especie.
Ejemplo: El Instituto Butantan de Brasil produce antídotos especializados para especies locales como la jararaca y la cascabel.
Un tratamiento vital, pero aún inaccesible para muchos
A pesar de su efectividad, el acceso al suero antiofídico sigue siendo limitado en muchas regiones del mundo debido a su alto costo, la falta de infraestructura en áreas rurales y la escasa inversión en su producción. Esto aumenta la morbilidad y mortalidad asociadas al accidente ofídico, especialmente en comunidades vulnerables.
Un llamado a la acción
Las mordeduras de serpientes son una de las pocas enfermedades graves cuyo tratamiento tiene una solución clara y efectiva. Apoyar la investigación, producción y distribución de sueros antiofídicos es una tarea urgente y necesaria para reducir las muertes y discapacidades permanentes.
Ayuda a salvar vidas hoy
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El suero antiofídico polivalente de Biotecfar Fabricado en Venezuela, está diseñado para neutralizar los venenos de especies como: Bothrops colombiensis y Crotalus durissus cumanensis.
Este suero se produce a partir de inmunoglobulinas derivadas del plasma equino, siguiendo estándares de calidad para garantizar su eficacia y seguridad.
El Suero Antiofídico del Instituto Clodomiro Picado de Costa Rica es una preparación de inmunoglobulinas altamente purificadas mediante la técnica de precipitación con ácido caprílico.
La tecnología usada permite obtener un producto de alta calidad y eficacia clínica que ha sido usado extensamente en Latinoamérica por más de 15 años en la terapia de pacientes que sufren envenenamientos por vipéridos.
Estudios preclínicos publicados en prestigiosas revistas científicas han demostrado que el Poli Val-ICP neutraliza los venenos de la mayoría de los vipéridos de importancia médica de Centro y Suramérica, con la excepción de la serpiente cascabel sudamericana.
El Faboterápico Antivipmyn® Tri Fabricado en México por Laboratorio Silanes, está compuesto por fragmentos F(ab’)₂ de inmunoglobulina G (IgG) hiperinmune antivipérida obtenida del caballo.
La IgG es una proteína del sistema inmunológico formada por dos pares de cadenas polipeptídicas, su función principal es reconocer y unirse a moléculas extrañas, conocidas como antígenos.
Desde el punto de vista funcional, la IgG se divide en dos regiones principales:
Fracción Fab: Es la parte que se une específicamente al antígeno (por ejemplo, el veneno de serpiente).
Fracción Fc: Es una región constante responsable de activar otras partes del sistema inmunológico, pero también es la que presenta mayor capacidad inmunogénica, lo que significa que puede desencadenar reacciones alérgicas o inmunológicas.
En los faboterápicos como el Antivipmyn® Tri, se elimina la fracción Fc, dejando solo los fragmentos Fab. Esto reduce significativamente el riesgo de efectos secundarios, como reacciones alérgicas, al mantener únicamente la parte de la molécula responsable de neutralizar el veneno.